Viernes - SOMOS SULLOS


SOMOS SULLOS

Erin Kranz 

Escritura de Hoy: “Pero ahora, así dice el Señor, el que te creó, Jacob, el que te formó, Israel:” No temas, que yo te he redimido; te he llamado por tu nombre; tú eres mío.” Isaías 43:1, NVI 

Tema: El pueblo de Dios a través del tiempo es creado para Su placer y Su gloria.

AL PRINCIPIO

Esta semana hemos atravesado la verdad de que vivir a nuestra manera no satisface. Aprendimos lo que significa poner verdaderamente a Dios en primer lugar, nuestro llamado a obedecer los mandamientos de Dios y la necesidad de hacer un plan intencional para nuestros días aquí en la Tierra. Nuestro último estímulo para ti es un pensamiento simple: Dios te creó para Sí mismo.

Todos nos hemos preguntado por qué estamos realmente aquí. Afortunadamente, Dios no nos dejó solos con esta enorme pregunta, sino que nos dio muchos vislumbres de la respuesta a lo largo de las Escrituras. Como dice nuestro versículo del día, Dios nos formó, nos redimió y nos llamó para sí mismo. Incluso desde el principio, leemos: “Y Dios creó al ser humano a su imagen; lo creó a imagen de Dios; hombre y mujer los creó.” (Génesis 1:27, NVI). A ninguna otra cosa en toda la creación de Dios se le dio el honor de ser creada a Su semejanza. David nos recuerda esto en los salmos: “¡Reconozcan que el Señor es Dios; él nos hizo y somos suyos! Somos Su pueblo, ovejas de su prado.” (Salmo 100:3, NVI).

REDIMIDO

Desafortunadamente, la mayoría de nosotros sabemos cómo sigue la historia después de eso: el pecado entra al mundo y nos distrae y nos separa de Dios. ¡Pero incluso en aquel entonces, Dios tenía un plan para redimirnos! Me encanta que nuestro título reciba una actualización después de la muerte y resurrección de Jesús; David nos llamó ovejas, pero Juan nos llama hijos: “¡Fíjense qué gran amor nos ha dado el Padre, que se nos llame hijos de Dios! ¡Y lo somos! El mundo no nos conoce, precisamente, porque no lo conoció a ” (1 Juan 3:1a, NVI). Y, además: “Pero a todos los que le recibieron, a los que creyeron en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios, los cuales no nacieron de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios” (Juan 1:12-13, NVI). 

Espero que sepas cuánto te ama Dios. Fuiste diseñado por Él y para Él y un día pasar la eternidad con Él.

Hágalo Algo Personal: Saber que Dios te creó para Sí mismo porque Te quería y Te ama es una comprensión liberadora. No tenemos que tratar de encontrar nuestro valor en nada que el mundo nos diga que persigamos. ¿En qué áreas de tu vida puedes aflojar tu agarre y aceptar la definición de Dios de quién eres realmente?

Ore: Amado Dios, te doy gracias por Tu amor. Te agradezco por Tu firmeza y porque Tus planes superan nuestro entendimiento. Gracias por enviar a Tu hijo, Jesús, para que yo pueda ser Tu hijo. Muéstrame dónde todavía estoy tratando de hacer la vida a mi manera y ayúdame a descansar en la paz que proviene de escucharte. En el nombre de Jesús, Amén.

Leer: Génesis 1:27; Salmo 100:3; Salmo 24:1; Jeremías 31:3; 1 Juan 3:1; Juan 1:12-13; 1 Juan 3:2; Filipenses 3:20

Versículo de Memorizar de la Semana: “Porque nada de lo que hay en el mundo —los malos deseos de la carne la codicia de los ojos y la arrogancia de la vida—, proviene del Padre, sino del mundo.” I Juan 2:16, NVI