FE VS. SENTIDO COMÚN
Denise Linton
Escritura de Hoy: “Vivimos por fe, no por vista.” 2 Corintios 5:7, NVI
Tema: Es tentador basar su fe en las circunstancias: lo que ve que Dios hace o deja de hacer en su vida. Base su fe solo en Dios.
CAMINANDO EN LA OSCURIDAD
Cuando yo era adolescente, tenía problemas para seguir las reglas en casa, especialmente para cumplir la hora límite de llegar a casa. Había aprendido a caminar por la casa en la oscuridad, pasando por alto todos los muebles y deslizándome en la cama sin ser notada. A la mañana siguiente mi padre me preguntaba a qué hora había regresado a casa, y mi respuesta era: “A las 11:00 p. m., mi hora límite”. Una noche, me había pasado varias horas de la hora límite y comencé a caminar a través de la casa oscura. Unos metros dentro de la sala, me encontré con un mueble y dejé escapar un pequeño grito, lo rodeé a tientas y seguí adelante, solo para encontrarme con otro mueble. Nuevamente, dejé escapar un sonido de dolor. Resulta que mi padre había reorganizado los muebles antes de acostarse. A la mañana siguiente, me preguntó a qué hora había llegado a casa y tuve que admitir que había llegado varias horas más tarde de la hora límite. Me habían descubierto y acepté mi castigo.
Mi creencia de que no me descubrirían desobedeciendo mi hora límite de llegar a casa se basaba tanto en el hecho de que los muebles no se movían como en mi capacidad para caminar a ciegas por la casa en la oscuridad. Cuando seguimos ciegamente nuestras propias perspectivas, estamos sentenciados. No fue fe en que los muebles no se moverían; era más de sentido común que los muebles no se mueven solos y la suposición de que nadie más los movería.
El sentido común es terrenal, mientras que la fe está en el ámbito espiritual. No se basa en lo que sabemos, sino en lo que no sabemos ni vemos. ¿Con qué frecuencia confiamos en el sentido común para explicar nuestras circunstancias? En una escena de "Little Boy", Pepper quería demostrar desesperadamente que podía mover la montaña. Mucha gente miraba y se reía, pero cuando hubo un terremoto en ese momento exacto, la gente necesitaba una explicación. Algunos comenzaron a creer, pero la mayoría quería explicarlo. El sentido común nos dice que no hay forma de que este niño pueda mover la montaña o hacer temblar la tierra.
FE, NO CIRCUNSTANCIAS
En Marcos 5:25-34, una mujer con flujo de sangre se acercó a Jesús por detrás y tocó Su túnica. Cuando Jesús sintió que el poder abandonaba Su cuerpo, se volvió y miró a la mujer. Ella le dijo que sabía que, si solo lo tocaba, sería sanada (Marcos 5:28,33). El sentido común habría sido creer a los médicos que le habían dicho que era incurable, sin esperanza de vida, sin forma de ser parte de la sociedad. Pero la mujer no andaba por l sentido común ni por la vista; ella estaba caminando con fe.
Yo creo que muchas personas luchan con la fe porque han experimentado momentos en los que el resultado no es el que querían que fuera. Antes de convertirme en seguidora de Jesús, uno de mis compañeros de trabajo se enfrentó a una situación trágica. Su hijita estaba muy enferma y le quedaban pocos días de vida. Recuerdo que todos oraron para que el bebé se sanara, pero la bebé murió. Pensé por mis adentros: “¿Por qué la oración no funcionó y por qué murió la bebé? ¿No era esa una falsa esperanza?
Una de mis citas favoritas de la película “Little Boy” proviene de la escena en la que el Sr. Hashimoto y el Padre Oliver estaban discutiendo sobre Pepper y la lista sagrada en la que está trabajando. Hashimoto pregunta si el sacerdote estaba despertando las esperanzas del niño con respecto a la vuelta a casa de su padre. Hashimoto preguntó qué pasaría si el padre del niño resultase estar muerto. El sacerdote respondió que es la voluntad de Dios y que, si eso era lo que sucedió, Dios también sacaría adelante a Pepper.
UN CAMINO DE FE
No ha sido un camino de fe fácil, pero a lo largo de los años, a medida que mi relación con Dios se ha vuelto más personal, he aprendido a mirar más allá de las circunstancias y a tener fe en la sabiduría y el entendimiento de Dios. “Porque mis pensamientos no son los de ustedes, ni sus caminos son los míos, afirma el Señor. Mis caminos y mis pensamientos son más altos que los de ustedes; ¡más altos que los cielos sobre la tierra!” (Isaías 55:8-9, NVI). Estoy aprendiendo a confiar en Él, no en las circunstancias ni en mi sentido de...
A lo largo de la película, la gente comenzó a mirar y algunos comenzaron a creer en la fe. Lentamente, el odio desapareció, los limites raciales se borraron, el amor comenzó a brillar y se hicieron amistades. Sin importar el resultado, Dios había estado obrando durante toda la situación.
Hágalo Algo Personal: Yo personalmente sé que no es un camino fácil mantener la fe en circunstancias difíciles. Primero, comience a reconocer a Dios cuando lo vea trabajando. Comience con las cosas pequeñas. ¿Ese espacio de estacionamiento que acaba de abrirse? Dele a Dios la alabanza. ¿Cuándo el auto finalmente arranca en el quinto intento? Dele a Dios la alabanza. No intente simplemente explicarlo con un pensamiento de sentido común. Conozca mejor a Dios leyendo la Biblia y aprendiendo sus promesas. Recuerde la fidelidad de Dios a través de un diario de oración y alabanza: escriba peticiones de oración con la fecha en que las puso en manos de Dios. Luego, cuando Dios conteste la oración, anote la fecha y los detalles para que lo recuerde. Esto le dará la evidencia que necesita para enfrentar los tiempos difíciles con una fe más profunda.
Ore: Dios Padre, perdóname por las veces que no he caminado por fe, sino que he caminado por vista. Perdóname por las veces que he estado tan atrapada en el sentido común pensando que olvidé que Tú tienes el control. Por favor, ayúdame a aprender a tener fe en todas las circunstancias y no solo cuando las cosas me salen bien. Tus caminos son más altos que los míos y no siempre entiendo que lo que está sucediendo detrás de escena te glorificará. Gracias por Tu fidelidad y el amor que me tienes.
Leer: 2 Corintios 5:7; Marcos 5:25-34; Isaías 55:8-9; Salmo 23
Versículo de Memorizar de la Semana: “Si tuvieran fe tan pequeña como un grano de mostaza, podrían decirle a esta montaña: ‘Trasládate de aquí para allá’, y se trasladaría. Para ustedes nada sería imposible.” Mateo 17:20b, NVI