DOLOR CON UN PROPÓSITO
Erin Kranz
Escritura de Hoy: “De igual manera, Jesús sufrió y murió fuera de las puertas de la ciudad para hacer santo a su pueblo mediante su propia sangre. Entonces salgamos al encuentro de Jesús, fuera del campamento, y llevemos la deshonra que él llevó.” Hebreos 13:12-13, NTV
Tema: El sacrificio puede sentirse como la muerte a lo que queremos o deseamos, pero Jesús nos mostró cómo perseverar más allá del dolor temporal por lo que es eterno.
UNA HISTORIA BREVE DE UN NACIMIENTO
A QUICK BIRTH STORY
Permítanme comenzar diciendo que, en general, tengo poca tolerancia al dolor. Mi madre solía temer que me clavara una astilla porque decía que todos los vecinos me oirían gritar cuando intentara sacármela. Por eso, al pasar a mi primer embarazo, mi esposo se sorprendió al principio cuando le dije que quería prescindir de la epidural durante el mayor tiempo posible durante el parto. Sabía que no me apetecía el dolor, pero también creía que era lo mejor para mí. Ese terminó siendo el enfoque que adopté con mis tres bebés, y agradecí que los nacimientos de mis hijos fueran experiencias increíblemente empoderaste. Sí, fue un sacrificio. Sí, hubo mucho dolor, pero sabía que el dolor tenía un propósito: traer a mi bebé al mundo.
SACRIFICANDO POR LO MEJOR
Una buena amiga con la que crecí abandonó la fe hace varios años, y una de las razones fue que sentía que el cristianismo la llamaba a hacer cosas que no quería. Cuanto más reflexiono sobre ello a lo largo de los años, más real me doy cuenta de que es cierto. Muchas veces hubiera preferido elegir mi propio camino o seguir mis propias inclinaciones. Muchas cosas no han sido fáciles, y he derramado lágrimas de duelo y de entrega por diferentes cosas a las que Dios me ha llamado.
Seguir a Cristo como tu verdadero Dios Señor requiere sacrificios, pero apoyarse demasiado en ese lado de la ecuación es una apuesta limitada. Nos sacrificamos porque sabemos que algo mejor está por venir. Cuando ahorras para una casa o unas vacaciones, haces sacrificios en tu presupuesto porque sabes que algo mejor está por venir. Lo mismo ocurre con nuestro caminar Cristiano: Jesús se sacrificó y pasó por el dolor de venir a la Tierra y la cruz por algo mejor. Así como el dolor del parto trae el don de la vida, más allá del sacrificio, encontramos una relación con el único Dios verdadero y una eternidad juntos adorándolo.
Hazlo Algo Personal: ¿En qué aspectos de tu vida has sentido el llamado a sacrificarte para seguir y honrar a Dios? Tómate un tiempo para reflexionar sobre lo que Jesús sacrificó por nosotros y para contar las bendiciones que Él nos proporcionó al final de tu sacrificio.
Ore: Padre Dios, es imposible hablar de sacrificio sin mirarte y agradecerte por enviar a Tu hijo, Jesús, por nosotros. Gracias porque entiendes cómo se sienten nuestros sacrificios. Ayúdame a tener una perspectiva eterna ante las decisiones difíciles que la vida puede traer y a apoyarme siempre en Ti. En el nombre de Cristo Jesús, amén.
Lee: Santiago 1:2-8,12; 1 Pedro 5:6-10
Versículo de Memorizar de la Semana: “Lo conozco yo, el Señor, que escudriño la mente y pongo a prueba el corazón; que pago a cada uno según su conducta y según el resultado de sus obras.” Jeremías 17:10, RVC