DIOS PUEDE MANEJARLO
Carey Madding
Escritura de Hoy: “Pero ustedes, queridos amigos, deben edificarse unos a otros en su más santísima fe, orar en el poder del Espíritu Santo y esperar la misericordia de nuestro Señor Jesucristo, quien les dará vida eterna.
Tema: Es necesario evitar lo negativo. Hacemos esto construyendo algo diferente: fe, vida de oración, permanecer dentro del amor de Dios y recordar que no tenemos nada sin la misericordia de Jesús.
PONGA LA OTRA MEJILLA
Jesús nos ordenó evitar conflictos y alegatas.. En Mateo 5:39 (NVI), Él dijo: “Pero yo digo: No resistan al que les haga mal. Si alguien le da una bofetada en la mejilla derecha, vuélvele también la otra." Esto parece un poco pasivo, ¿no? Estoy dispuesto a poner la otra mejilla y no tomar represalias, pero también he analizado las muchas formas en que Nehemías respondió a la oposición y la resistencia. Cuando la oposición, la calumnia o el chisme se convierten en un problema, tenemos opciones.
ORAR
En Nehemías 4:1-3, los enemigos del pueblo de Dios comenzaron a ridiculizar la reconstrucción de la muralla. En los versículos cuatro y cinco, Nehemías responde con oración. Comienza diciendo: "¡Escucha, Dios nuestro, cómo se burlan de nosotros!". Luego el versículo seis dice: “Y construimos la muralla”. Exactamente lo mismo sucede en los versículos ocho y nueve: “y se pusieron de acuerdo para atacarnos y destruir la ciudad de Jerusalén. Entonces oramos a nuestro Dios, pero también pusimos guardias de día y de noche.” (Nehemías 4:8-9, NVI). Sólo oración. Eso fue todo. Y luego continuaron el trabajo. ¡Ciertamente puedo hacer esto! ¡No es pasivo! Es llevar activamente la situación al Señor Dios y dejarla en Sus manos.
ESTIMULAR Y PREPARAR
La siguiente vez que surgió oposición, Nehemías respondió de manera diferente: “Armé entonces al pueblo con espadas, lanzas y arcos, y lo repartí por familias en las partes bajas de la ciudad, y detrás de las murallas y en los espacios abiertos. Luego, me reuní con los hombres importantes del pueblo y con los oficiales del templo, y con el pueblo en general, y les dije: “No tengan miedo de esa gente. Recuerden que el Señor es grande y temible. Luchemos por defender a nuestros hermanos, nuestros hijos, nuestras hijas y nuestras esposas; ¡luchemos por nuestros hogares!”” (Nehemías 4:13b-14, NVI). Aunque se prepararon para la batalla, no pelearon. La preparación y el fuerte estímulo de Nehemías fueron suficientes para detener al enemigo. La Biblia dice que sus planes fueron frustrados. A veces, todo lo que se necesita es tomar las medidas adecuadas y centrarse en Dios, quien peleará nuestras batallas.
REFUTAR LA CALUMNIA
Después de completar las murallas alrededor de Jerusalén, los enemigos de Nehemías iniciaron una campaña de difamación. “Ha llegado a nuestras ciudades el rumor, y Guesén lo confirma, de que los judíos y tú piensan rebelarse, y que por eso estás reconstruyendo las murallas de Jerusalén. Según este rumor, tienes la intención de proclamarte rey.” (Nehemías 6:6, NVI). ¿Alguna vez alguien ha inventado mentiras sobre usted? De mi si. La mayoría de las veces, no hay nada que usted pueda hacer al respecto. Hacer una gran defensa pública a menudo lo hace parecer más culpable y más preocupado por su “imagen” de lo necesario o útil. Pero a veces es importante decir la verdad. Nehemías responde: “Esto que dices no es verdad. Tú mismo lo has inventado.”:y después el ora: “Pero ahora, oh Dios, fortalece mis manos” (Nehemías 6:8, 9b, ESV ).
EL ORDEN CORRECTO
No existe una respuesta estándar para cada ataque. Pero la defensa principal es Dios. “Quédense tranquilos, que el Señor peleará por ustedes.” (Éxodo 14:14, RVC). El segundo principio que nunca debemos olvidar es este: “Yo no actúo por medio de un ejército, ni por la fuerza, sino por medio de mi espíritu. ”Lo ha dicho el Señor de los ejércitos.” (Zacarías 4:6, NVI). Comience con estos dos principios en mente y luego proceda según las indicaciones de Dios. Recuerde siempre que su responsabilidad número uno, incluso enconflicto, es glorificar a Dios.
Hágalo Algo Personal: Cada uno de nosotros tiene una respuesta típica de lucha/huida. Podemos negarnos a abordar conflictos que deberían afrontarse con delicadeza. Podemos saltar sobre él con los dos pies sin orar ni pedir la dirección de Dios. Deténgase. Ore. Confíe en Dios no sólo para pelear sus batallas, sino también para guiarlo a su siguiente paso.
Ore: Dios Padre, confío en Ti. Guíame por el camino que quieres que vaya. Muéstrame cómo actuar. Evita que reaccione. Te entrego la oposición en mi vida.
Leer: Salmo 74:10, 68:1,3; 2 Samuel 22:2-4,7, 32-37
Versículo de Memorizar de la Semana:
“Entonces el ángel me respondió y me dijo: «Es la palabra del Señor a Zorobabel, que le dice: “Yo no actúo por medio de un ejército, ni por la fuerza, sino por medio de mi espíritu.”
»Lo ha dicho el Señor de los ejércitos.” Zacarías 4:6, RVC