UN RITMO SUAVE
Carey Madding
Escritura de Hoy: “En verdes pastos me hace descansar. Junto a tranquilas aguas me conduce; me infunde nuevas fuerzas. Me guía por sendas de justicia haciendo honor a su nombre.” Salmo 23:2-3, NVI
Tema: Podemos tener confianza porque Jesús el Buen Pastor nos guía.
ABEJA TRABAJADORA
Recientemente, escribí sobre la jubilación y mi nueva etapa de la vida. ¿Puedo decirles que me cuesta “recostarme en verdes pastos”? Me despierto con una lista de cosas por hacer en mente. Pueden ser cosas pequeñas como llamar y concertar una cita, escribir una carta o ir de compras. Todavía no estoy en el espíritu de “dejarme llevar” por un calendario libre de reuniones, plazos y responsabilidades. Nunca he sido una visionaria, sino una abeja obrera; ¡Y una abeja obrera que no trabaja muere en el mundo natural! Sí, entiendo y practico el descanso sabático, pero quiero decir, ¿todos los días?
APRENDE DE MI
Tal vez puedas aprender de mí, mientras todavía estás subiendo a los niños a la camioneta o preparándote para tu presentación en la escuela o el trabajo. A Dios le gustaría que tu estuvieras en paz y reposo, incluso mientras trabajas y haces. Su plan es guiarnos –diariamente– a Su paz. Entonces, mañana, despertémonos y pasemos diez minutos sentados en el porche, escuchando en silencio la voz de Dios. Escribe la lista que te atormenta y ora sobre ella, entregando tus planes a Dios. Respira profundamente tres veces y aléjate de las prisas durante cinco minutos. Este será mi nuevo plan. Me moveré lentamente.
Se necesita intencionalidad para que descansemos en pastos verdes. Sin embargo, cuando nos levantamos y nos dirigimos a la oficina, llevamos la paz de Dios con nosotros. Su plan no es una obsesión con una lista de tareas pendientes o un plan de cinco años, aunque sí nos llama a planificar y trabajar duro, incluso como si estuviéramos trabajando para Él. Pero considere que más que nuestros esfuerzos, Dios quiere nuestros corazones. Él quiere lo mejor para nosotros: un ritmo suave que restaure nuestras almas y nos acerque a nuestro Dios Padre. Luego, desde ese lugar de relación, caminamos en rectitud, ya sea en el trabajo, en el hogar, en la escuela o viajando. Producimos buenas obras del fruto de nuestra vida al lado de nuestro Buen Pastor, Cristo Jesús.
Hágalo Algo Personal: ¿Eres un hacedor? ¿Eres un aprensivo? Tal vez seas despreocupado y simplemente afrontes las cosas como vienen. Todos nuestros atributos tienen un lado débil. Sé una oveja que se acuesta a los pies del Buen Pastor, velando y esperando Su guía. Él no sólo te dará paz y descanso, sino que también te mostrará tus próximos pasos del día. Y al seguir esa guía, encontrarás el éxito, el favor y la confianza que provienen de operar sólo en el centro de la voluntad de Nuestro Dios.
Ore: Señor Dios, espero delante de Ti. Traigo mis preocupaciones, mis listas, mis planes... Te los entrego todos. Dirígeme, cámbiame, guíame en Tus planes para mi día. Te amo y quiero caminar en Tu camino. Te ofrezco tanto mi trabajo como mi tiempo libre. ¡Guíame por senderos de rectitud para que Tu Nombre reciba gloria! En el nombre de Jesús oro. Amén.
Leer: Mateo 11:28-30; Salmo 27:4, 40:3, 100:3, Isaías 26:3; Juan 14:27; Colosenses 3:23
Versículo de Memorizar de la Semana: “El ladrón no viene más que a robar, matar y destruir; yo he venido para que tengan vida y la tengan en abundancia. “Yo soy el buen pastor. El buen pastor da su vida por las ovejas.” Juan 10:10-11, NVI