TODOS ESTAN PRIVADOS
Jenna Worsham
Escritura de Hoy: “Pues todos han pecado y están privados de la gloria de Dios.” Romanos 3:23, NVI
Tema: No hay duda de que todos somos pecadores. Aunque parezca imposible reconciliarse con Dios, Jesús ha abierto un camino.
SIEMPRE ERRANDO
Me han dicho que mi vida parece perfecta. Esto no es cierto y no quiero engañar a nadie. Intento ser honesta y directa acerca de mis defectos; no me faltan defectos. Olvídese de una vida perfecta, ni siquiera puedo imaginarme vivir libre de pecado durante un solo día de 24 horas. Hay 10 mandamientos y, aunque creo que algunos no los violo con frecuencia o en absoluto, otros necesito mejorar. Arruino incluso los órdenes más fáciles.
Aquí hay uno en el que estoy trabajando (entre otros): guardar el Sábato. Esta misma semana intentamos celebrar el Sábato en familia. Resulta que soy terrible descansando. ¡Descansando! Intenté apagar mi teléfono por el día. Seguí buscándolo o pensando en las razones por las que lo necesitaba. Les grité a mis hijos por hacer desastres con las manualidades. Me enojé y me puse de mal humor cuando nadie quiso participar en un devocional familiar.
El objetivo del día de reposo es honrar a Dios y descansar de nuestro trabajo. Ni siquiera pude hacer eso bien durante 24 horas. No querrá usted oír hablar de todas las otras formas en que me equivoco. Basta decir que estoy convencida de que, si no puedo ser como Jesús en mi día libre, probablemente necesite ser salvada en todas las demás áreas y también en los días alternos.
ESTAMOS EN ESTO JUNTOS
Durante Covid, nuestros amigos de Charlotte Ski Boats colocaron un cartel que decía: "Estamos todos juntos en esto" junto con un gran corazón en la pancarta. Recuerdo llorar la primera vez que lo vi porque era verdad y porque el compañerismo hace soportables las cosas difíciles. Después de un tiempo, olvidé lo mucho que significó para mí ese primer día. Creo que cuando nos sentimos aislados, recordar que no estamos solos es realmente importante. Una vez que nos aclimatamos a la idea, ya no es tan conmovedor.
Como pecadores, todos tenemos el mismo problema: tanto los creyentes como los no creyentes el pecado. No podemos dejar el hábito por nuestra cuenta. Cuando podemos admitir nuestras luchas y ayudar a quienes están fuera de nuestro círculo a sentir que no están solos en su lucha, ¡es una diferencia aún mayor que un cartel alentador!
EL CAMINO
A veces admitimos que "nadie es perfecto" y lo dejamos así. El problema con esto es: ¡alguien era perfecto! Si conoce a Jesús, conoce el Camino personalmente. La respuesta a nuestro problema del pecado es Jesús. Él es “EL camino, la verdad y la vida” (Juan 14:6a, NVI). No fue fácil expiar el pecado. Fue necesario Su cuerpo quebrantado y Su sacrificio de sangre para salvarnos. Sin embargo, ¡se abrió un camino! ¡Esas son buenas noticias! Si nosotros (la humanidad) no lo aceptamos, permaneceremos como estamos, aislados de Dios y, eventualmente, de todos los que Él ha redimido.
Hágalo Algo Personal: ¿De qué manera puede acercarse a las personas que sufren y recordarles que usted también se queda corto? ¿En qué área está luchando actualmente para seguir a Jesús (como mi intento de guardar el Sábato) y puede ser abierto y honesto al respecto con alguien más que esté luchando? ¿Cómo podría ayudarle en su propio caminar con Jesús escuchar lo que otros están aprendiendo y cómo están luchando?
Ore: Dios Padre, gracias por amarme... incluso cuando soy un pecador. Ayúdame a amar a otras personas – como Tú lo haces – tal como son. Ayúdame a seguir luchando por la santidad, aunque nunca llegue por sí solo. Eres fiel, compasivo y humilde. Ayúdame a seguirte en fe, compasión y humildad también en cada área de mi vida.
Leer: Jeremías 14:20; Romanos 5:12, 3:22-24
Versículo de Memorizar de la Semana: ‘Jesús le dijo: “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí’”. Juan 4:6, RVC