Lunes - ASUNTOS DEL CORAZÓN


ASUNTOS DEL CORAZÓN

Susan Murray

Escritura de Hoy: Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón.” Mateo 6:21, NIV

Tema: Invierte tu dinero en causas que hagan avanzar el reino de Cristo porque Él se invirtió en ti.

TESORO

Todos tenemos un conjunto de prioridades. No podemos hacerlo todo ni tenerlo todo (aunque lo intentemos), así que priorizamos. Con recursos limitados, ya sea dinero, tiempo o energía, elegimos dónde gastar esos recursos. Algo motiva esas prioridades.

 Priorizamos lo que más apreciamos y amamos. Lo que amamos es lo que atesoramos. ¿Cómo sé qué es lo que realmente valoro más? Una vez escuché a un predicador decir: “Para identificar el tesoro de tu corazón, hazte esta pregunta: ¿Qué hace que tu dinero salga volando de tu billetera más rápido sin pensarlo mucho ni lucha?”

GENEROSIDAD

Dios nos llama a ser generosos con los demás, y todos luchamos con cuán generosos deberíamos ser. Existe esta tensión entre preguntar cuánto necesito dar para agradar a Dios y el temor de que, si doy con sacrificio, pueda necesitar ese dinero más tarde. Es posible que el temor y no la avaricia sea lo que afecta nuestra generosidad.

CORAZÓN

La generosidad tiene que ver más con los motivos de nuestro corazón que con una cantidad. 1 Corintios 13:3 nos dice que podemos dar todo, pero si no está motivado por el amor, entonces no vale nada. En Lucas 21, Jesús elogió a la viuda pobre que dio todo lo que tenía (2 monedas pequeñas) y dijo que dio más que las grandes cantidades que dieron los ricos. Fue su corazón de amor y confianza en que Dios proveería para sus necesidades lo que impulsó su generosidad. Es realmente una cuestión de fe y confianza: “Cada uno debe dar según lo que haya decidido en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al que da con alegría.” (2 Corintios 9:7).

Hazlo Algo Personal: ¿A dónde va tu dinero y por qué? ¿Qué motiva tu donación: el miedo o el amor? ¿Das solo cuando tienes de sobra? ¿Dejas que fluya el dinero con entusiasmo o te aferras a él y solo lo das a regañadientes? Son preguntas difíciles, en verdad. ¿Te sientes culpable? Entonces vuelve tus ojos a Jesús. Míralo entregando generosamente todas las riquezas del cielo, sacrificando Su vida por ti en la cruz para poder tenerte. Tú eres Su tesoro. Su amor por ti no se basa en cuánto das, sino que es incondicional y se basa únicamente en quién es Él.

Ore: Padre, Tu generosidad es inconmensurable. Ayúdame a ver cuán generoso fue Jesús conmigo hasta que mi corazón rebose de gratitud. Ayúdame a liberarme de todo temor y a rebosar de un corazón dispuesto a dar generosamente a las causas que hacen avanzar Tu reino aquí en la tierra. Amén.

Lee: Mateo 6:19-21,31-33; 2 Corintios 9:6-11

Versículo de Memorizar de la Semana: “Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón.” Mateo 6:21, NIV