UNA REINA CELEBRADA
Escritura de Hoy: “Luego el rey ofreció un gran banquete a todos sus príncipes y siervos en honor de Ester, y además disminuyó tributos a las provincias y les otorgó beneficios, como corresponde a un rey..” Ester 2:18, RVC
Tema: De la misma manera que Ester agradó a Dios (y al rey) y por eso fue celebrada, nuestra obediencia agrada a Dios y es motivo de celebración.
CONVERTIDA EN REINA, PERO PERMANECIÓ OBEDIENTE
Ester era una mujer admirable. Se negó a actuar como los demás y se comportó con dignidad. Incluso a una temprana edad, tuvo el valor y la autodisciplina para enfrentar el aislamiento, el peligro y el genocidio. Su profunda fe y el favor de Dios la llevaron más lejos de lo que nadie jamás hubiera imaginado. Después de ser coronada reina, se nos dice que siguió la orden de Mardoqueo de no revelar quién era realmente. En Ester 2:20, aprendemos que ella permaneció obediente a Mardoqueo "como lo había hecho bajo su cuidado". Ésta es una ilustración perfecta de ser obediente a la autoridad dada por Dios.
LA OBEDIENCIA LLEVA AL GOZO
Debido a que Ester actuó en obediencia, incluso hasta el punto de arriesgar su vida, encontró el favor del rey. Aunque no pudo revocar la ley que imprudentemente había sido engañado para que firmara, concedió a los judíos permiso para luchar en defensa de sus vidas. Se regocijaron cuando oyeron la noticia y festejaron cuando derrotaron a sus enemigos. La fiesta de Purim todavía se celebra hoy en Israel, ¡tan grande fue el gozo y la celebración!
Hágalo Algo Personal: En el Antiguo Testamento, Dios habló a través de profetas, sacerdotes, padres y otras figuras de autoridad que colocó en jerarquías sobre naciones, clanes y familias. En el Nuevo Testamento, como seguidores de Cristo, Dios nos habla a través de Su Palabra y de Su Espíritu Santo. Él puede utilizar a otros creyentes para ayudarle a sentir Su voluntad. Una vez que conoce los planes de Dios, es difícil pero sencillo elegir la obediencia. Y la obediencia, finalmente, resulta en bendición y celebración. Aunque puede ser difícil, ¡vale la pena!
Ore: Dios, ayúdame a permanecer obediente a Ti sin importar si estoy en una posición alta o baja. No puedo imaginar que el destino de toda una nación dependa de la eficacia de mi obediencia. Sin embargo, ayúdame a ser fiel cuando sea llamado a acciones valientes. Ayúdame a ignorar mi propia incomodidad o peligro cuando sea necesario. Gracias por darnos una dirección clara y guiarnos fielmente. En Tu Nombre oro. Amén.
Leer: Ester 8:8-17, 9:16-22; 1 Corintios 5:7-8
Versículo De Memorizar de la Semana: “El pueblo estaba feliz de haber contribuido voluntariamente, pues todo lo que ofrecieron al Señor lo dieron de corazón y de manera voluntaria.” 1 Crónicas 29:9, RVC