Deseos: La Vida a Mi Manera, Parte 1

Guía del Discusíon

Creemos que la vida se trata de nosotros. “La vida a mi manera es la mejor manera.” ¿O lo es? No importa cuánto lo intentemos, cuánta riqueza o reconocimiento tengamos, no estamos satisfechos. La verdad es que, a menos que vivamos a la manera de Dios, nunca estaremos satisfechos. Nuestros deseos serán tan insatisfechos como nosotros. Consideremos las formas en que podemos elegir vivir la vida a la manera de Dios.

Lo que necesitará: Una Biblia o su aplicación de la Biblia, un cuaderno, un bolígrafo y un marcador. Los siguientes versículos resaltados para usted están enlazados para acceder a ellos fácilmente durante su estudio.

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1. ¿Por qué deseo has orado que Dios no te concedió? ¿Entiendes ahora por qué fue así o no?


2. Lea Eclesiastés 2:3. ¿Qué deseos no vale la pena perseguir y cuáles sí?


3. No todos los deseos son pecaminosos. Lea Génesis 2:9; 3:5-6. ¿En qué momento un deseo se vuelve pecaminoso?


4. Lea Eclesiastés 12:13; Mateo 6:33. ¿Cuál es “todo el deber del hombre” según Salomón que Jesús nos recordó “Buscar primero…”?


Paso de Acción: Escriba sus tres deseos principales en la vida. Ahora evalúa si los pones en orden de importancia. ¿A cuál le dedicas más tiempo? ¿Hay algún deseo que desearías que fuera una prioridad, pero que queda relegado a un segundo plano? Compara tus principales deseos con el deseo de Dios para ti. ¿Hay áreas que desea ajustar? De ser así, ¿qué medidas puede tomar para que su agenda coincida con sus intenciones?


 Profundizar

¿Qué podemos aprender de Salomón y su minuciosa búsqueda del significado de la vida? Leamos algunas secciones de Eclesiastés y analicemos las diversas actividades que él consideró que se quedaron cortas:

6. Lea Eclesiastés 2:12-17. Considere cómo incluso cosas buenas como vivir sabiamente pueden carecer de sentido.


7. Lea Eclesiastés 2:18-26. Considere cómo incluso cosas buenas como el trabajo duro pueden carecer de sentido. ¿Qué odia Salomón de su “trabajo”? ¿Le molesta el hecho de que todo por lo que trabajamos (las cosas materiales) se heredarán a otra persona?


8. Lea Eclesiastés 5:8-20. Consideremos cómo la riqueza y la pobreza pueden ser mal utilizadas y carecer de sentido.