Study Guides - ES

Así como usted nace con habilidades y aptitudes naturales, está dotado en su nuevo nacimiento espiritual. El Espíritu de Dios viene a vivir dentro de cada creyente y el Espíritu también le da a cada uno un don. Es parte del propósito de nuestra vida: conocer y crecer en nuestros dones, usándolos en beneficio del Cuerpo de Cristo y dando gloria a Dios.

A veces, caemos en el pensamiento de que todos los creyentes viven una vida empoderada, escuchando a Dios todos los días sobre cada tema. Podemos desanimarnos cuando esta no es nuestra experiencia. En realidad, ahora somos el equivalente del Arca del Pacto del Antiguo Testamento. El Espíritu Santo reside en nosotros. ¿Será que no nos estamos posicionando para experimentar a Dios plenamente?

Ahora que sabemos quién es el Espíritu, ¿cómo interactuamos con Él? ¿Cómo sentimos Su guía o redirección? Analicemos cómo podemos distinguir Su voz de nuestros “sentimientos internos y deseos humanos.

Entre la Última Cena y la traición en el Huerto de los Olivos, Juan registra cuatro capítulos completos de las enseñanzas de Jesús. Él trata de preparar a Sus discípulos para Su muerte. Él ora por los discípulos y por todos los creyentes que vendrán después, incluyéndonos a nosotros. Jesús promete que siempre estará con nosotros y continúa explicando que Su Espíritu Santo nos será dado para ayudarnos de muchas maneras. Miremos a este Abogado que nos es prometido.

En el mundo actual, todo el mundo propugna la tolerancia. La mitad del tiempo, queremos complacer a los demás y estar de acuerdo con ellos, pero queremos nuestros derechos y queremos las cosas a nuestra manera. Jesús dijo que Él es el Camino. Veamos esa afirmación.